He oido hablar de
Groenlandia,
Como la tierra que
dios olvidó.
Donde el ártico
confunde la mente,
y lo amargo es lo
normal.
Para mí es
diferente.
Es un lugar donde
puedes divertirte,
y para decirte algo
sobre ella,
voy a intentar
probarlo ahora.
Esta tierra de mística
belleza,
que dios planificó a
solas,
hay algo que te atrapa,
es difícil de
comprender.
Esta tierra de
montañas
con cimas nevadas,
que llegan a rozar los
cielos,
a no ser que hayas
estado allí,
dificilmente
comprenderás.
Hay caza y hay pesca.
y es un placer
saborearlo.
Se que no me creerás,
sobre este desecho del
ártico,
si realmente quieres
ver belleza,
date un paseo por un
glaciar,
y mira el interminable
hielo,
que llega hasta el
polo,
y ve a escalar
montañas,
simplemente para
respirar aire puro,
mira el sol ponerse al
amanecer,
en este lugar no es
algo raro.
Contempla la aurora
boreal,
en los cielos bailar
una canción,
y el sol de media
noche.
Mira la luna brillar
por la mañana,
y mira el pueblo
esquimal.
Ni un minuto te
aburrirás.
Mira las mágicas
torres de icebergs,
saliendo del fiordo,
anillos de hielo en la
montaña,
que la madre
naturaleza ha tallado,
es verdadera belleza y
es la mejor.
Alejado del mundo
ocupado,
y hasta estas
planicies de arena pescando,
escucha la música de
los cuervos,
como si cantasen
serenatas a sus compañeros.
Y ahora que ya he
terminado el lapiz,
me echo a un lado,
y solo te diré una
cosa,
no he contado ni la
mitad.
Si el mundo entero
fuese Groenlandia,
tan pura, tan limpia y
tan blanca,
habría paz
otra vez,
las cosas serían
justas,
y todo el mundo
tendría trabajo que hacer.
Así que unamos
nuestras manos,
y hagamos de este
lugar un lugar,
donde merezca la pena
vivir.
Aeropuerto de Narsarsuaq, Groenlandia.
Gracias Señor Gavanido y Señorita Tiesto,
por compartir esta sensación.
